Páginas 3 y 4

lunes, 2 de mayo de 2011
Se fue a buscar el coche y al llegar hasta éste, vio que le habían roto el retrovisor derecho. Hasta que no cobre a final de mes, no podrá llevarlo a arreglar. Era día 5.

Cogió el camino de todos los días, llegó al puente y se paró en el arcén. Salió del vehículo, se dirigió hacia la barandilla hecha de piedra, pasó una pierna y después la otra hasta postrarse en la pequeña pasarela quedándose con las puntas de los zapatos en el aire.
-¡Vamos! Un simple paso y acabarás con este sufrimiento- se alentaba a sí mismo para hacerlo.
Dejaba el pie derecho en el aire cuando…
Bip bip bip… Le estaban llamando al móvil.
-Un día más y nada. Mañana lo volveré a intentar.-
Volvió a saltar la barandilla y fue a coger el teléfono con paso tranquilo.
-Hola mamá
-Hola hijo, ¿Cómo estás?
-Bien, ahora me iba a cenar.
-¿Todavía no has cenado? ¿Por qué no has venido a casa conmigo y con tu padre? Hubiéramos cenado los tres juntos, como antes…
-Tengo prisa mamá, ya hablaremos.
-Llámanos algún día hijo, te echamos mucho de menos, sobretodo tu padre que está muy arrepentido de todo…
-Tengo que colgar. Adiós.
-Adiós hijo. Te queremos.

Entró en el coche y condujo hasta la puerta casa. Llegó rápidamente – ya podría haber el mismo tráfico que ahora por las mañanas – protestó. Aunque ahora venía lo peor. Aparcar.
Tras dar unas cuantas vueltas para encontrar un sitio donde dejar el coche, lo encontró. Estaba lejos de su casa y en una zona un tanto peligrosa pero era dejarlo allí o continuar dando vueltas, y ya estaba demasiado cansado para continuar con las vueltas.

Abrió la nevera para prepararse algo para cenar y lo único que habían eran unos huevos - ¿estarían bien todavía? – miró la fecha de caducidad y se habían caducado dos días atrás. Dudó un momento y se acordó de la pobreza que hay en el mundo y de la gente que daría lo que fuera por esos huevos caducados. Así que los puso en una paella y se los sirvió para comérselos.
Al terminar de cenar, recogió lo que ensució y se fue a la habitación.
Se cambió y se preparó para irse a dormir cuando vio que había un sobre marrón encima de la cama.
Se alarmó. ¿Le habían entrado a robar? No, el piso estaba igual que cuando se había ido por la mañana. ¿Quién le habría dejado ese sobre?
Lo examinó.
No había remitente, únicamente había escrito en el dorso la palabra “VIVE”. ¿Qué querría decir?
Lo abrió muy lentamente por miedo a que fuera una bomba o cualquier acto terrorista, se acordó de las noticias que tiempo atrás hablaban de cartas que contenían Antrax.
Al abrir el sobre vio algo que lo dejó atónito. ¿Qué quería decir?
Estaba demasiado cansado y decidió irse a dormir.

Se despertó muy cansado, se arrastró hasta la ducha, se preparó su almuerzo y se fue hacia el trabajo.
Caravana.
Encendió la radio buscando algún dial interesante cuando escuchó algo que le llamó la atención:
-Descubierto un poblado en el Himalaya, que, hasta el día de hoy no habían tenido contacto alguno con el progreso de la Humanidad. Parece ser que la comunidad se llama Ahmilosh que significa…- ¡dichoso túnel sin cobertura! –…este hallazgo representa lo que aún nos queda por descubrir de nuestro mundo. Es por eso que National Geografic…- Apagó la radio.
-¿Qué puede significar? Ayer por la noche ese sobre que, ¿quién me lo debió enviar?, y hoy escucho esto en las noticias… ¿qué querrá decir? Tal vez, no sé…-
El claxon insistente del coche de atrás le hizo reaccionar. Miró a su alrededor algo aturdido y vio que los coches de delante ya habían avanzado un largo trecho. Puso la primera y continuó la marcha.

3 comentarios:

  1. Si, pero tio penja mes que em quedo amb ganes!!!

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  2. Habrá un par de cambios.
    En lugar de publicar los lunes, lo haremos los viernes (por lo que esta semana tendrá premio).

    Por petición popular, aumentaremos hasta 3 las páginas publicadas.

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